Conocer, aprender, descubrir, son algunas de las cosas que se hacen al salir de la zona de confort y más cuando esto se realiza en otro país. Alrededor del mes de junio fue cuando tome la decisión de querer aventurarme a vivir eso y más. Mi meta era clara deseaba ir a otro país que me ofreciera mucha cultura, mucha diversidad, algo diferente y a la vez ofrecerle a ese país de alguna manera todo lo que yo podía dar, quería impactar, dejar huella, motivar e inspirar en el lugar donde fuera a vivir una nueva experiencia. Deseaba ser parte de una institución u organización en la cual me pudiera sentir identificado con su forma de trabajar.
Entre más de 1000 propuestas de empresas y proyectos de los cuales podría ser parte, hubo una que capto mi atención, era la oportunidad que ofrecía un colegio del cual nunca había escuchado, pero la descripción de lo que podría hacer en este colegio me motivo a aplicar a esta oportunidad, además de estar situado en un país famoso por su cultura, Guatemala...