Cerramos este mes de marzo con tanto calor y con la Semana Santa. Las cortas vacaciones servirán de descanso y de encuentro personal.  Como maestro recuerdo a Jesús como maestro de vida y no de muerte. Los españoles con su visión del mundo medieval trajeron a Guatemala en ese concepto religioso del dolor del sufrimiento como un modo de sensibilizar y traer adeptos a la religión.  El mundo, la religión y motivación del hombre ha cambiado.  Cierto que la pobreza en que viven muchos de nuestros hermanos, sintoniza con la vida de necesidades, dolor y sufrimiento que tuvo Jesús. Pero tenemos que salir de tal situación para que puedan visualizar la vida con alegría de Jesús resucitado.