Llevamos un año inmerso en el mundo de la pandemia y nos estamos defendiendo para salir sanos y salvos.

Acostumbrémonos a sentir y pensar en positivo, que es una invención rentable para vencer el pesimismo y desarrollar al máximo las posibilidades de vivir sanos y felices. Nuestro optimismo no solo sea un ejercicio mental, sino que sea una fuerza que nos ayude a conquistar las metas y poner vencer al Coronavirus. Que el optimismo sea la esencia de mi yo en todas las actividades que realicemos a lo largo de la vida.    Las expectativas de salir de la pandemia tienen que ser altamente positivas. Luchemos contra la depresión que hace que perdamos el sentido del humor, la capacidad de reír y sonreír o buscar ayuda.    

Los miedos, los temores y las ansiedades envenenan nuestro optimismo. Busquemos siempre actividades ordinarias para mantener el estado de ánimo.   Las actividades podrían  ser:   hablar con la familia o amigos,  escuchar  música, leer y escribir, caminar,   hacer  ejercicios,  etc.    Eso para mantener un espíritu vital, es importante vivir inmerso en la laboriosidad.

Les doy este último consejo que yo me lo aplico para mí mismo: “La actitud del optimismo nos da ventaja en el campo de la salud, del trabajo, del juego y del amor”.

TODOS SOMOS CHAPERO

Vicente Chapero García