Tu hijo necesita confianza y libertad
El ser humano tarda alrededor de un año en dar sus primeros pasos y la necesidad de protección es absoluta.
Cada ser humano está programado con el empuje necesario para conquistar la autonomía y felicidad.
Si nada lo impide, todos los seres de la naturaleza tienen una tendencia natural a alcanzar toda su potencia.
Maslow, padre de la psicología humanista, defiende la tesis que el ser humano como los otros seres vivos, tienen una tendencia natural al desarrollo pleno.
Para el ser humano, alcanzar el potencial tiene connotaciones que implican una mayor evolución que las plantas y los animales. Dado que nuestro hijo tiene un cerebro complejo, que le permite sentir, pensar y desarrollar relaciones sociales, la naturaleza le pide más que a un animal.
El cerebro humano, nuestro hijo, muestra una tendencia natural a sentirse bien consigo mismo y con las demás personal y buscar su felicidad. Después encontrar sentido a su existencia. El fin de todo ser humano es la autorrealización plena.
El neurocientífico Pinker asegura que la lucha por la vida, el deseo de libertad y la búsqueda de la propia felicidad y forman parte de nuestro ADN.
Maslow afirma que el hombre llega a alcanzar un estado de armonía y satisfacción plena. Este autor ilustra esta tendencia con una pirámide de necesidades básicas. Estas son: 1. Necesidades básicas, 2. Seguridad, 3. Amor y pertenencia, 4. Estima y 5. Autorrealización.
Vean la lógica la escala de necesidades del ser humano. Así como un árbol necesita el espacio para desarrollarse, el hijo necesita de la confianza y la libertad de sus padres. Así como la rama del árbol se estiran para alcanzar los rayos del sol, el cerebro de nuestro hijo necesita explorar, jugar, experimenta y descubrir su mundo y buscar el desarrollo pleno.
Les recuerdo que nuestro hijo es como un árbol, está programado para crecer y desarrollarse plenamente.
Nosotros como padres o maestros, ni nuestros hijos sabemos qué tipo de árbol llegará a ser. Con los años llegaremos a descubrir si nuestro será un grande y hermoso árbol. Confía que el cerebro de tu hijo está programado para desarrollarse plenamente y alcanza todo su potencial. Como padres debemos confiar plenamente en nuestros hijos.
Vicente Chapero García.